Según la Secretaría de Infraestructura, se han presentado problemas para llevar los materiales hasta Santo Domingo.
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Los habitantes de Santo Domingo Savio y los barrios vecinos del Nororiente de Medellín tendrán que esperar aún más para poder estrenar de nuevo la siniestrada Biblioteca España.
La reconstrucción, que comenzó en enero pasado, tiene plazo contractual hasta febrero de 2023, sin embargo, desde ya la secretaria de Infraestructura Física, Natalia Urrego Arias, confirmó que las obras se alargarán un poco más debido a las dificultades que ha tenido el constructor IDC Inversiones.
Urrego contó que la obra alcanza un avance del 10%, aunque debería ir en 15%, lo que se explica por los problemas que han tenido para llevar materiales y elementos de gran tamaño al sitio de las obras por la estrechez de la vía de acceso.
“Podríamos ir un poco más adelante, es cierto, tenemos plazo estimado hasta febrero de 2023. Es posible que tengamos que alargarnos un poquito más, pero de 2023 no pasará que estemos entregando la biblioteca para toda la comunidad”, prometió, en diálogo con la emisora Blu Radio.
La funcionaria explicó que las labores se han centrado en el desmonte de la fachada y los elementos exteriores, para adelantar luego el reforzamiento estructural y cumplir así las normas vigentes de sismo resistencia.
Siete años de espera
La rehabilitación del parque biblioteca, denominado biblioteca Nororiental por la actual administración, beneficiará de manera directa a cerca de 133.000 habitantes de la comuna 1 y permitirá revivir oferta turística que hubo en la zona cuando el espacio estaba en funcionamiento.
De acuerdo con cálculos oficiales, cuando terminen las obras la biblioteca será visitada por más de 645.000 personas cada año.
La nueva biblioteca tendrá un área construida de 5.208 metros cuadrados y estará conformada por tres edificios o cajas, dotados con plataformas, miradores, rampas, senderos y escaleras, lo que permitirá aprovechar mejor el espacio, en tanto que se aumentará en un 35% el área construida.
Asimismo, dichas estructuras estarán dentro de una especie de parque ambiental de 10.235 metros cuadrados que ayudará a mejorar el paisajismo y a brindar una mayor estabilidad del terreno.
La biblioteca fue inaugurada en 2007, pero, al año siguiente, comenzó a tener fallas en la fachada. Desde 2013 su operación fue a medias; finalmente, fue cerrado por completo en 2015, y así ha permanecido desde entonces. Ahora, los habitantes esperan que, por fin, las obras sí culminen con éxito y se pueda reabrir el sitio.