Policía, Ejército y Gobernación planean acciones conjuntas luego de que ilegales pretendieran tomarse el sector de la subestación eléctrica principal de la empresa que opera el complejo.
Luego de nueve días de que tres guardas de seguridad resultaron heridos con explosivos en medio de un ataque perpetrado por ilegales en el sector conocido como Higabra, de Buriticá, Antioquia, las autoridades persisten con operativos en el sector para retomar el control y dar con los responsables.
Según indicó el coronel Óscar Rico, comandante de la Policía en Antioquia, la empresa propietaria del título minero elevó una solicitud ante la Gobernación para que junto con el Ejército logren estabilizar la zona, recuperar algunos túneles que han sido tomados por grupos delincuenciales y evitar que allí sean ingresados de nuevo explosivos.
«Un bloqueo a todo lo que pueda ingresar especialmente material explosivos y todo lo que pueda arrojar con procesos de policía judiciales. Es un trabajo interinstitucional que nace de la misma empresa, la gobernación, en ese caso, la fuerza pública a través de la policía y a través de las fuerzas militares», señaló el coronel.
Vale la pena recordar que al momento del ataque en el lugar hizo presencia la Unidad Nacional Contra la Minería Ilegal de la Policía Nacional para recuperar la seguridad de este tramo de la mina y garantizar la continuidad de las labores de explotación.
En la guerra subterránea que se vive allí se han empleado cilindros bomba, mercurio, atentados con explosivos y armas largas tanto contra personal de la compañía como contra la fuerza pública en medio de las acciones de control que intenta ejercer. De hecho esto motivó que la empresa minera anunciara acciones legales internacionales contra el Estado colombiano, a la par que la Procuraduría ha solicitado informes detallados sobre las acciones de seguridad que se han tomado con el fin de evitar que la problemática escale.