El presidente informó que las protestas mineras y campesinas en Boyacá llevaron a mover la conmemoración del 7 de agosto a Leticia
En la noche del 7 de agosto de 2025, el presidente Gustavo Petro anunció a través de su cuenta en X que se alcanzó un acuerdo con los manifestantes del paro minero en Boyacá. En su mensaje, escribió:
“Levantado el paro minero en Boyacá. Acordamos la transición energètica para la pequeña minería del carbón en Boyacá”.
Trino de Gustavo Petro sobre el paro minero en Boyacá | vía X (Twitter)
La declaración se produjo luego de semanas de bloqueos que afectaron a varios municipios y que coincidieron con la conmemoración de la Batalla de Boyacá.
La jornada conmemorativa, tradicionalmente realizada en el Puente de Boyacá, tuvo este año como sede la ciudad de Leticia, Amazonas.
Aunque en un principio se explicó que el cambio respondía a un mensaje de soberanía en el marco del diferendo limítrofe por la isla Santa Rosa con Perú, el propio jefe de Estado reconoció que las manifestaciones en Boyacá y Cundinamarca fueron determinantes para modificar la logística del evento.
- crédito Colprensa/Freepik/captura de pantalla Google Maps
Petro, en su intervención desde Leticia, explicó: “Esos son los temas que hoy impiden, por la conflictividad social, hacer este acto allá en el Puente de Boyacá (…) iremos al Puente de Boyacá en homenaje al Ejército, pues también se hace allá por sobradas razones”.
Las movilizaciones, protagonizadas por comunidades mineras, campesinas, guaqueras y agrícolas, habían generado afectaciones en movilidad, suministro de combustible y actividad económica en la región. Durante su discurso, el presidente también comparó las problemáticas rurales en diferentes ecosistemas del país:
“El campesinado en el páramo se asimila a lo que podríamos llamar al campesinado en la selva. Tienen una causa común que esta sociedad tiene que resolver, hay campesinado al que le es difícil cultivar. No hay tierra fértil en el páramo ni en la selva. Esos dos campesinados que se han venido ubicando en páramo y la selva son el producto de la ausencia de una reforma agraria”.
En otro apartado, abordó el tema de la minería de esmeraldas en el occidente de Boyacá y propuso abrir un diálogo con el sector:
“Quiero que hagamos una mesa con los mineros para ver cómo se democratiza las explotaciones de esmeraldas en Colombia. Difícil, lo sé. Pero creo que todo el mundo debe caber en el occidente de Boyacá siendo boyacense. Ya existe una guerra por las esmeraldas, pero hay que lograr un pacto”.
El 7 de agosto, Leticia, capital del Amazonas, acogió por primera vez la ceremonia conmemorativa de la Batalla de Boyacá, en el que participaron altos mandos del Gobierno nacional - crédito Juan Diego Cano/Presidencia
Previo al anuncio del levantamiento del paro, la situación en las vías había alcanzado un punto crítico. Los bloqueos interrumpieron el transporte intermunicipal entre Bogotá y ciudades como Tunja, Paipa, Sogamoso y Duitama. De acuerdo con cifras del sector transportador, el 98 % de la operación estaba suspendida, con más de 800 salidas canceladas y cerca de 45.000 usuarios afectados. Las pérdidas económicas superaban los 1.000 millones de pesos.
Las terminales de transporte en los municipios más impactados permanecían cerradas, mientras que buses y camiones quedaban detenidos en puntos de bloqueo. La ausencia de corredores humanitarios dificultaba el traslado de personas que necesitaban atención médica, asistir a clases o cumplir con sus actividades laborales.
En medio de este panorama, la declaración presidencial sobre la transición energética para la pequeña minería de carbón se convirtió en un punto central del diálogo con los manifestantes. La propuesta busca establecer mecanismos que permitan a los pequeños productores adaptarse a nuevas tecnologías y diversificar sus actividades, en el marco de la política de transición energética que impulsa el Gobierno.
El cambio de sede del acto conmemorativo también tuvo un componente diplomático. En Leticia, el mandatario encabezó la lectura de un pronunciamiento sobre la soberanía de Colombia en la isla Santa Rosa. Sin embargo, enfatizó que la conflictividad social en Boyacá había impedido la organización de la ceremonia en el sitio histórico.
Mientras tanto, sectores económicos y sociales de Boyacá y Cundinamarca mantienen la expectativa sobre los compromisos alcanzados. La confirmación de Petro de que el paro quedó levantado abre la puerta a la reactivación del transporte y al restablecimiento progresivo de las actividades comerciales en la región.
Gustavo Petro anunció que desde enero de 2026 todos los soldados del Ejército Nacional recibirán un salario mínimo mensual de $1.300.000 - crédito Juan Diego Cano/Presidencia
La mesa de diálogo planteada por el presidente para tratar temas mineros, agrícolas y de reforma agraria se perfila como el siguiente escenario de trabajo entre el Gobierno y las comunidades. Con la transición energética para la pequeña minería de carbón como uno de los acuerdos iniciales, el Ejecutivo buscará avanzar en soluciones de fondo a las problemáticas estructurales que dieron origen a las protestas.