El presidente del la JAC de la vereda Los Robles, Armando Uriel Ávila Chávez, completa siete días en poder del ELN.
La ola de violencia en el sur de Bolívar sigue sumando víctimas en este territorio. Cerca de 300 personas de las veredas Capellanía, Los Robles y El Tesoro, en zona rural de Santa Rosa del Sur, se desplazaron durante esta última semana por cuenta de los enfrentamientos entre los grupos armados que delinquen en la zona.
“La población empezó a salir desde el fin de semana pasado, cuando comenzaron estos combates. Poco a poco han ido abandonando el territorio y, en este momento, muchas de estas familias se encuentran en el corregimiento de Villa Flor, donde hemos podido brindar asistencia humanitaria. Esto es muy preocupante, pues también hay decenas de familias en hacinamiento y confinadas, que tienen miedo de salir por las vías para llegar a Villa Flor”, señaló en diálogo con Blu Radio el alcalde de Santa Rosa, Milton Olaya.
A su vez, el mandatario alertó que ya se completan siete días del secuestro del presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda Los Robles, Armando Ávila, quien estaría en poder del ELN, junto con otro habitante de la zona.
“Desde la semana pasada, lamentablemente, se encuentra secuestrado el presidente de la JAC de la vereda Los Robles y un trabajador del municipio de Santa Rosa. Todavía seguimos esperando la liberación de Heider Jaramillo, quien se encuentra secuestrado desde mayo. Es realmente preocupante esta situación que estamos viviendo, tanto en el casco urbano como en las zonas rurales de todo el municipio. Por eso insistimos y seguimos pidiendo apoyo al Gobierno Nacional y a las organizaciones de derechos humanos para que nos ayuden a recuperar a los secuestrados, pero también a garantizar que la población pueda estar y permanecer en el territorio”, dijo.
Precisamente, la Defensoría del Pueblo emitió una nueva alerta sobre la crisis humanitaria que afrontan las comunidades del sur de Bolívar, por cuenta de la disputa entre los grupos armados por el control del territorio y de la minería ilegal.
De acuerdo con la Defensoría, además de los confinamientos, el desplazamiento masivo y el secuestro de líderes y civiles, los habitantes de esta zona del departamento son usados como escudos por los grupos armados durante los enfrentamientos y se ven sometidos a constantes restricciones de movilidad.
Según datos de la entidad, en lo corrido del año se han registrado 27 emergencias humanitarias, 15 desplazamientos masivos y 12 confinamientos de comunidades, que han afectado a 15.240 personas en Santa Rosa del Sur; 5.409 en Montecristo; 3.090 en Arenal del Sur; 249 en Cantagallo; 160 en Morales y 76 en Río Viejo. Asimismo, explicaron que actualmente hay tres emergencias activas.
“La disputa territorial entre el Clan del Golfo (Ejército Gaitanista de Colombia – EGC) y el ELN, sumada a la presencia del Bloque Magdalena Medio Gentil Duarte del Estado Mayor de los Bloques y del frente de las disidencias de las FARC de la línea de Calarcá, ha convertido la Serranía de San Lucas, en el Magdalena Medio, en un epicentro de violencia generalizada, desplazamientos masivos, confinamiento de comunidades y violaciones al Derecho Internacional Humanitario”, indicaron.
En la comunicación, la Defensoría instó a tomar acciones urgentes para lograr una respuesta integral del Estado que priorice la protección efectiva de la vida, la integridad y la dignidad de las comunidades, así como el restablecimiento de los derechos de las víctimas y de la presencia institucional permanente en el territorio.