La Policía informó que los turistas ingresaron a un territorio ancestral, por lo que fueron perseguidos por un miembro de la comunidad que fue capturado.
Un incidente entre varios turistas e indígenas wayuu se registró en el Cabo de la Vela, en la Alta Guajira, el cual terminó con la captura de una persona a quien le encontraron un revólver sin documentos y con seis cartuchos para el mismo.
Según la Policía, la captura se produjo en la vía principal hacia ese corregimiento de Uribia, cuando el capturado, Jenny Harvey Palacio Bernier, se movilizaba en una camioneta 350, tipo estaca y seguía a otro vehículo, donde se desplazaban tres turistas del interior del país, a quienes les disparó.
El problema comenzó cuando los turistas ingresaron con su vehículo al cerro de Jepirra, un territorio ancestral wayuu, por lo que fueron requeridos por los miembros de la comunidad, ya que este es un lugar donde van las almas de los indígenas fallecidos.
Habitantes del sector afirman que uno de los turistas sacó un arma de fuego e hizo varios disparos, lo que provocó que uno de los wayuu sacara un arma y comenzara a perseguirlos, hasta que se produjo su captura.
Agrega que los turistas desconocían que era tierra sagrada para los nativos, y cuando salían, le cobraron la falta, pero estos no tenían dinero.
“En un acto de intolerancia, el hoy capturado decidió seguir a los turistas y cuando estaban cerca de la Subestación de Policía, les atravesó el vehículo, descendió y le accionó el arma de fuego en dos ocasiones a los civiles”, explica la Policía.
Después de esto, dicen las autoridades que varios familiares del capturado quisieron oponerse al procedimiento policivo y se llevaron la camioneta 350, tipo estaca, al igual, que querían llevarse al capturado.
“A estas personas se les explicó lo que estaba sucediendo y entendieron el proceder de los uniformados, luego de lo cual el capturado fue presentado ante la autoridad judicial competente por el delito de fabricación, porte o tráfico de armas de fuego y municiones”, precisó la Policía.
Ante este hecho ocurrido en este sitio turístico de La Guajira, el Consejo Superior de Palabreros emitió un comunicado en el que hace un llamado a la reflexión por los “hechos continuos por parte de terceros y procedimientos propios de algunos miembros del pueblo wayuu que ponen en entredicho el valor sagrado que posee Jepirra como el símbolo mayor espiritual del pueblo wayuu”.
Afirman que Jepirra es el territorio espiritual de todo el pueblo wayuu y que” por lo tanto no puede ser objeto de comercio y explotación indiscriminado, sobre todo por aquellos operadores turísticos que lo único que les importan es el beneficio personal sin prever una acción que conlleve a un saneamiento espiritual”.
“El Consejo Superior de Palabreros considera y propone que ante la necesidad de calmar y mantener la armonía social y espiritual de las almas de los distintos Eirrukos que allí reposan que deben están ofendidas y sentirse agraviadas en su paz espiritual, las autoridades cabezas de la zona del Cabo de la vela, deben promover un acto de retribución de saneamiento y resarcimiento espiritual hacia esa almas y al sitio más sagrado del pueblo wayuu, basado en el orden del mandato del Sistema normativo Wayuu con el propósito de que dichas almas y el territorio espiritual se sientan retribuidos por tantas ofensas, amenazas y agravios”, proponen los palabreros.
También afirman que el pueblo wayuu y quienes usan o explotan este sitio como negocio particular está, están en mora para restaurar y armonizar tantos daños espirituales causados por uso indiscriminado e inadecuado por parte de quienes contaminan la paz de las almas en reposo allí asentadas.
