Él -recién salido de prisión- y su cómplice entraron por una ventana a una empresa de eléctricos en el centro de Bogotá. Sacaron dinero, cheques y hasta papelería.
Bajo la modalidad de escalera humana dos sujetos entraron a robar a una empresa de eléctricos en el barrio Ricaurte, centro de Bogotá.
En cámaras de seguridad quedaron registrados todos sus movimientos, cómo ingresaron por una ventana del segundo piso y la huida.
“Supongo que hicieron escalera humana porque abrieron una de las ventanas del segundo piso, revolcaron toda la oficina, se llevaron todo lo que había de valor, el arma, los cheques”, contó Cristina Castaño, propietaria de la empresa.
Sin embargo, los criminales no consiguieron salirse del todo con la suya. El censor de movimiento se activó, alertado de que algo estaba sucediendo, por lo que el supervisor de seguridad llegó a verificar.
Al verse atrapados, huyeron, pero uno de ellos se refugió en un centro comercial y allí quedó acorralado.
Lo insólito es lo que dijo al momento de su captura.
“Que había salido hace poco de la cárcel y que él estaba tratando de trabajar para comprarle una casa a su mamá”, comentó Castaño.
El ladrón quedó a disposición de la autoridad competente para su judicialización. Parte de lo que había robado logró ser recuperado; sin embargo, su cómplice sí consiguió escapar con la otra mitad del botín.